Cerca de 400 hogares caldenses se han beneficiado con el programa, «Familias Fuertes, Amor y Límites», estrategia de prevención para proteger a los jóvenes entre 11 y 14 años, avalada por la Organización Panamericana de la Salud y el Ministerio de Protección Social.
El proceso hace énfasis en la relación de padres e hijos, como base primaria, para abordar después el comportamiento social, mejorar la convivencia y enseñarles a los padres las pautas de crianza con amor y límites, lo que favorece a los menores en situación de riesgo.
Durante ocho sesiones, se busca crear conciencia en el manejo de problemáticas como: consumo de drogas psicoactivas, actividades ilícitas, embarazos tempranos, vandalismo y diferentes formas de violencia.
Esta propuesta de prevención se encamina a detectar «personitas con dificultades psicosociales o en su relación de escuela, pero que no sean problemas de responsabilidad penal», explicó Gloria Inés Saldarriaga, portavoz de la Territorial de Salud.
Meridiano Informativo de la Voz de los Andes.